Estados Unidos emite grave alerta sobre seguridad en Colombia y recomienda reconsiderar viajes a este país

El gobierno de Estados Unidos ha lanzado una seria advertencia a sus ciudadanos sobre la situación de seguridad en Colombia, instándolos a reconsiderar sus planes de viaje al país sudamericano. La alerta, emitida por el Departamento de Estado, clasifica a Colombia en nivel 3 debido a la preocupante situación de «delincuencia y terrorismo» que afecta a varias regiones.

El documento oficial menciona específicamente áreas como Arauca, Norte de Santander y la frontera colombo-venezolana, donde existe un alto riesgo de secuestro. Según la alerta, grupos como el Ejército de Liberación Nacional (ELN), las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia – Ejército del Pueblo (FARC-EP), la Segunda Marquetalia y el Clan del Golfo, entre otros, continúan operando y llevando a cabo ataques terroristas en el país.

Los objetivos de estos grupos pueden incluir terminales de transporte, mercados, instalaciones gubernamentales, estaciones de policía, instalaciones militares, hoteles, restaurantes, aeropuertos y otras áreas públicas. La alerta también destaca las manifestaciones que se producen en diversas localidades, advirtiendo que pueden volverse violentas y afectar la circulación y la seguridad de los ciudadanos.

En particular, se enfatiza que los departamentos de Arauca y Norte de Santander están completamente vetados para los ciudadanos estadounidenses, debido a la alta incidencia de delitos violentos y la presencia activa de grupos terroristas en esas áreas. Además, se advierte a los viajeros que eviten acercarse a la frontera con Venezuela, ya que podrían enfrentar detenciones arbitrarias por parte del régimen de Nicolás Maduro.

Esta nueva alerta de seguridad emitida por Estados Unidos pone en evidencia la preocupación internacional por el recrudecimiento de la violencia en Colombia y sus posibles implicaciones para el turismo y la estabilidad del país. La estrategia de seguridad implementada por el Gobierno actual enfrenta un desafío significativo, y será necesario tomar medidas efectivas para abordar estos problemas y garantizar la protección de los ciudadanos tanto nacionales como extranjeros.